Agradecer
Acciones que forjan el Espíritu Campoverde
Enseñar a tu hijo o hija a dar gracias por todo lo bueno que sí ocurre es enseñarle a vivir en una condición de ganancia. Por el contrario, darle un ejemplo de quejarse de todo, es vivir una actitud de pérdida constante. Agradecer y valorar todo lo bueno, es motivo de alegría…y eso, por supuesto ¡eso es buen espíritu!